El Ejército del Perú compró 30 blindados K-808 de Hyundai Rotem por US$60 millones, pagados al contado y sin licitación pública. La compra se realizó a través de la Fábrica de Armas y Municiones del Ejército (FAME), a pesar de que el modelo K-808 había sido descartado en 2023 por no cumplir con los requisitos técnicos. El contrato, firmado en noviembre de 2024, no ha sido hecho público, lo que genera dudas sobre la transparencia del proceso. Además, no se establecieron plazos de entrega, lo que podría retrasar la llegada de los vehículos.
El Ejército del Perú adquirió 30 blindados K-808 sin licitación, generando irregularidades en el proceso.
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