El asesinato de Kim ha dejado al país conmocionado y ha desviado la atención de otros escándalos. La política actual, representada por Milei y Kicillof, muestra una falta de empatía y responsabilidad. Es urgente reflexionar sobre la delincuencia juvenil y la necesidad de políticas efectivas que vayan más allá de la simple reducción de la edad de imputabilidad. La violencia y la marginalidad son problemas complejos que requieren un enfoque integral y compasivo, no solo medidas punitivas. La sociedad debe trabajar en la creación de oportunidades y en la reducción de la violencia para evitar que más jóvenes se conviertan en criminales.
El brutal crimen de Kim revela la falta de empatía y soluciones en la política argentina.
Deja un comentario
Lo siento, tenés que estar conectado para publicar un comentario.