A pesar de que se considera obsoleto, el iPhone de primera generación puede alcanzar más de 30.000 dólares si se mantiene en su empaque original. En 2023, un modelo sin abrir alcanzó un precio récord de 170.000 euros en una subasta. Este dispositivo, vendido solo por dos meses en 2007, se ha convertido en un objeto codiciado por coleccionistas. La demanda por artículos tecnológicos retro ha crecido y, aunque su funcionalidad es limitada, su rareza y valor simbólico lo hacen deseable.
El primer iPhone, si se mantiene sin abrir, puede alcanzar precios altos en subastas debido a su rareza.
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