Industriales argentinos afirman que no compiten en igualdad de condiciones con las importaciones y requieren apoyo gubernamental. Aunque el Gobierno reconoce altos costos, sostiene que los impuestos a la importación también son elevados. Las importaciones han ido en aumento, superando a las exportaciones con un déficit en la balanza comercial. Las empresas consideran más conveniente importar que producir localmente, lo que podría afectar el empleo. Además, advierten sobre los impactos de las políticas de aranceles de Estados Unidos que pueden perjudicar aún más la situación local.
Los industriales critican condiciones desiguales comparadas con importaciones y temen por el empleo en el país.
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